Las recompensas

Además del salario que todos percibimos existen otros tipos de recompensas, que serán valoradas, y van centrados en el cumplimiento del deber.

Cuando un trabajador realiza un esfuerzo extra por encima del promedio de los otros trabajadores se debe de crear una situación de equidad tanto en las tareas como en las recompensas.

El jefe debe reconocer y valorar en la medida de las posibilidades organizacionales el esfuerzo realizado y como esta actuación ayuda a los objetivos del área o departamento a corto, mediano o largo plazo, si por razones internas no se pudiera aplicar alguna clase de recompensa, el jefe debe de hacer alguna diferenciación a mote personal, reconociendo el logro de manera única y personal para con el buen trabajador ya que además de hacerlo sentir bien, les servirá de parámetro a los demás trabajadores para mediar su actuación.

Esto repercutirá en una mejor calidad de trabajo y en el incremento de la productividad de la que se es responsable.

La implementación de recompensas aunque solo sea por medio de palabra, por medio de la foto del empleado del mes u otras similares, compensaciones genéricas o económicas, repercutirán en el empleado generando orgullo, confianza y responsabilidad a quienes se la merecen.

Siempre es bueno tratar a los empleados como personas, no como "unidades de producción". Crear criterios éticos y de responsabilidad que estimulen su participación con el entorno organizacional.